jueves, 30 de mayo de 2024

Trabajar en equipo es darle más manos, mente y alma a tus proyectos


 En la vida nos encontraremos constantemente enfrentando retos y conquistando metas, en función de la magnitud del reto o la meta, el contar con las manos, mentes y almas adicionales que el trabajo en equipo da, facilitará el logro de nuestros objetivos y la  socialización de ellos.

 

Si eres una persona sana podrás con facilidad levantar una bolsa de comida para perro de 25 kilos, pero si quisieras levantar sin ningún aparato, con pura fuerza humana, un auto promedio cuyo peso es de unas dos toneladas ocuparías unas 80 personas, pero de que lo levantarían, lo levantarían.

 

El descubrimiento de América, la llegada del hombre a la luna, la revolución de las tecnologías de la información… piensa en algún evento que haya venido a cambiar el mundo y, si, es cierto, siempre habrá alguien que sea la imagen o ícono de la meta conquistada, pero también es cierto que esos grandes logros implicaron un equipo de cientos, en ocasiones miles de gentes que colaboraron para la consecución del mismo.

 

Los ejemplos anteriores tienen un símil con los retos y metas de la vida: tú solo podrás lograr muchas cosas, pero si potencializas ese esfuerzo adicionándolo con

la energía de otras personas, es obvio que el logro tendrá mayor alcance. Solo que para que se de lo anterior es un requisito ineludible el que las demás personas compartan el objetivo perseguido para poner su tiempo y esfuerzo en la consecución de la meta común.

 

Ahora bien, salvo que se trate de una meta eminentemente personal, la mayoría de los sueños tiene algo que es común a otras personas y que es lo que puede explotarse para sumar voluntades para el logro del mismo. La cuestión es saber identificar qué es lo que puede ser atractivo para los demás y así hacerlos partícipes del proyecto.

¿Qué quieres lograr?, ¿por qué lo quieres lograr?, ¿para qué lo quieres lograr?, ¿quiénes pudieran sumarse a la búsqueda de esta meta?; en la medida que tengas claridad en cuanto a las respuestas de los cuestionamientos anteriores se te facilitará el que en un momento dado puedas sumar más voluntades al proyecto.

 

Y cuando hablamos de voluntades –y esto debes tenerlo muy en mente-, no solo hablamos de manos, es decir, de fuerza operativa para “hacer”, sino también (y de ahí el título de este artículo) de mentes y almas, es decir, de ideas y pensamientos así como de sentimientos y voluntades. Luego entonces quienes participen deben no solo “hacer” sino también “pensar” y “sentir” el proyecto, de ahí que cuando pienses incluir más gente en la búsqueda de metas comunes deberás adoptar el papel de líder y propiciar que todos sean y se sientan parte del proyecto.

 

El trabajo de equipo no se circunscribe a que más gente esté trabajando por el logro de una meta, sino que trasciende este hecho pues busca que las ideas y pensamientos se fusionen y los sentimientos y emocionen dinamicen las acciones para conquistar los objetivos planteados, así que recuerda trabajar en equipo es darles más manos, mente y alma a tus proyectos.

 

 

Roberto Celaya Figueroa, Sc.D.

Formación • I+D+i • Consultoría

Desarrollo Empresarial - Gestión Universitaria - Liderazgo Emprendedor

www.rocefi.com.mx

 

 

Este artículo puede verse en video en https://youtu.be/t8gYp_0nzfA

 

 

También del mismo autor: Curso internacional para el mundo de habla hispana  “¿Tu helado se derritió? -Construcción dinámica de liderazgo trascendental-”. Más información en: https://hotmart.com/es/marketplace/productos/tu-helado-se-derritio-construccion-dinamica-de-liderazgo-trascendental/B91847525Q


No hay comentarios:

Publicar un comentario