No
creo que exista una persona que esté conforme al 100% con lo que es, tal vez
quisiera poder cambiar algo de su físico, de su personalidad, de sus sentimientos,
de la manera en que reacciona ante ciertas circunstancias o de lo que hace o
puede hacer, independientemente de lo que no nos guste de nosotros tenemos
mucho bueno, mejor o excelente que diariamente podemos elegir para nuestro
pensar, sentir y actuar.
Antes
que nada quiero aclarar eso de que “no puedes cambiar lo que eres”. Con esta
frase no me estoy refiriendo a aquellas áreas de mejora que sí puedes trabajar
en ti. Es más que obvio y evidente que tenemos un increíble potencial de cambio
y adaptación, de que podemos dejar viejos y dañinos hábitos y costumbres por
otras mejores, de que podemos siempre avanzar con un ánimo de ser cada vez
mejores.
A
lo que me refiero es a eso que te define como lo que eres, a eso que te hace
diferente, a esas cualidades que puedes explotar y a esos defectos que estás
llamado a disminuir. Aquello puedes y debes trabajarlo todos los días pues el
más importante proyecto que tienes eres tú mismo, pero esto es lo que te da las
características de tu personalidad y que difícilmente eliminarás de tu persona.
Pero
el meollo del asunto no es discutir que eres o que no eres, o si puedes cambiar
tal o cual cosa de ti o no, lo realmente importante del día a día que
independientemente de lo que seas, de lo que tengas, todos los días puedes
elegir lo mejor de ti para usarlo en tu proyecto de vida.
Imagínate
que vas a hacer una comida. Para realizar la receta puedes escoger los mejores
o los peores ingredientes. Ingredientes de primera, de calidad, frescos, sanos,
o bien ingredientes de segunda o tercera, de nula calidad, llenos de químicos y
procesados. La decisión será tuya así como las consecuencias de lo que comas.
Pues
bien igual en tu proyecto de vida, cual si fuera una receta puedes usar los
mejores ingredientes que tengas. ¿Eres desesperado, tienes mal humor o no
tienes paciencia? Obvio no elijas esos ingredientes para tu receta. ¿Por qué no
mejor elijes la confianza, la esperanza, el buen humor?, ¿no los tienes?, bueno
pues igual que en la alacena de tu cocina busca en la alacena de tu vida otros
ingredientes que sí tengas y que sí puedas elegir para tu receta.
¿Qué
a veces no puedes elegir? Mira, pensar así de inicio establece un fatalismo en
nuestra vida donde prácticamente decidimos que no podemos decidir. Yo quiero
pensar que sí, incluso cuando en ocasiones es eso casi imposible (como por
ejemplo en cuestiones de carácter), ¿por qué? por qué el simple hecho de pensar
que la decisión final está en mí me permite estar en plenitud de mis
capacidades, de mis habilidades, para enfrentar mi proyecto de vida.
Por
ejemplo, alguien te fastidió, ni modo, a veces así pasa, eso no lo puedes
controlar, pero lo que si puedes controlar es el ingrediente con que sazonaras
tu receta de vida. En este caso tienes la opción de enojarte (o de continuar
enojado) o bien de dejar pasar ese mal estado de ánimo no aferrándote a él con
ideas justificatorias que hacen permanezca ese mal estado de ánimo. La decisión
es tuya.
¿Qué
a veces lo anterior es difícil? No digo que no lo sea. Igual una buena receta
de cocina, una receta elaborada, es difícil y requiere de tiempo y esfuerzo,
pero te pregunto ¿qué será más difícil?, o mejor aún ¿qué hará más fácil o más
difícil tu vida: seguir molesto, enojado o enfadado o tratar (a veces tratar es
el primer paso para lograr) que se te pase el enfado? Finalmente la decisión es
tuya.
Todos
los días tendrás muchas experiencias que te permitirán decidir qué parte de ti
deseas trabajar para tu proyecto de vida, así que no lo olvides: No puedes
cambiar lo que eres, pero de todo lo que eres cada día puedes optar por lo
mejor de ti.
Roberto
Celaya Figueroa, Sc.D.
Formación
• I+D+i • Consultoría
Desarrollo
Empresarial - Gestión Universitaria - Liderazgo Emprendedor
Este
artículo puede verse en video en https://youtu.be/t0u5ff_C9A0
También puede descargarse gratis el e-book completo
del mismo autor "La Generación Ni-Ni-Ni” desde www.rocefi.com.mx (Menú “Libros” Sección “e-book gratis”